Llueve.
No es la lluvia que se espera (refrescante, melancólica).
Es un bramido de atmósfera oprimida, un arrebato sideral de estirpe vengativa, un capricho de titanes recelosos que trae más humedad, más bochorno, más sofoco, más languidez.
Pero llueve.
Y la humanidad exhala por su origen y destino, quiébrase en su pecho un anhelo de perpetuidades.
BEETHOVEN
Sonata for Violin and Piano No.9 'Kreutzer' in A Op. 47
1er. movimiento Adagio sostenuto-Presto
Cuando figura y número no sean
cifra de seres en totalidad
y aquellos que se besan mientras cantan
superen en saber al erudito,
cuando a la vida libre nuevamente,
y al mundo también libre, el mundo vuelva,
y una vez más las luces y las sombras
en claridad perfecta se aparean,
cuando en poema o cuento se registre
el verdadero acontecer del mundo
ante una sola y mágica palabra
todo lo absurdo y falso desaparecerá
BEETHOVEN
Sonata for Violin and Piano No.9 'Kreutzer' in A Op. 47
2do.. movimiento Andante con variazioni
Sonata for Violin and Piano No.9 'Kreutzer' in A Op. 47
2do.. movimiento Andante con variazioni
El rey abrazó a su ruborosa amada, y el pueblo siguió el ejemplo del rey, acariciándose unos a otros. Nada se oía, sino tiernas palabras y susurros de besos. Al fin dijo Sofía:
-La madre está entre nosotros, su presencia nos hará eternamente dichosos. Seguidnos a nuestra mansión, allí en el templo moraremos por siempre, custodiando el misterio del mundo.
La Fábula hilaba solícita y cantó en voz alta:
"Hoy ya empezó a reinar la eternidad:
en paz y amor cesó la hostilidad.
El largo sueño del dolor acaba,
Sofía es madre eterna de las almas".
BEETHOVEN
Sonata for Violin and Piano No.9 'Kreutzer' in A Op. 47
3er. movimiento Presto
Sonata for Violin and Piano No.9 'Kreutzer' in A Op. 47
3er. movimiento Presto
Buscamos por todas partes lo infinito, y no encontramos sino cosas
1 comentario:
Uno de mis primeros posts, fue acerca de un concierto al lado del estanque en el Jardin Botanico, lugar ideal para atraer a las musas con sus estatuas, sus reflejos de agua, la umbria de los arboles y el espiritu de mi coequiper a medias, el gran sordo.
Yo empeze mal, llevando un acoplado de comida para los gatos que nadie mira, y la orquesta, los arreglos y la previa con solos de marimba fueron tan pelmazos que el unico interes estaba ya en echarle el ojo director, pero ni siquiera eso basto, porque me eche un sueñito de aquellos y me desperto la supuesta trifulca campesina, ma que fiesta de la obra de LVB.
Publicar un comentario