TIZIANO Magdalena penitente, 1530-1535
XCVII |
Sólo sabemos toda nuestra altura
si alguien le dice a nuestro ser: ¡Levanta!
Y entonces, fiel consigo, se agiganta
hasta llegar al cielo su estatura.
De la vida común sería ley
el heroísmo en el humano ruedo
si no nos doblegáramos al miedo
de vernos y sentirnos como un rey.
Y entonces, fiel consigo, se agiganta
hasta llegar al cielo su estatura.
De la vida común sería ley
el heroísmo en el humano ruedo
si no nos doblegáramos al miedo
de vernos y sentirnos como un rey.
XIX
De las almas creadas
supe escoger la mía.
Cuando parta el espíritu
y se apague la vida,
y sean Hoy y Ayer
como fuego y ceniza,
y acabe de la carne
la tragedia mezquina,
y hacia la Altura vuelvan
todos la frente viva,
y se rasgue la bruma...
yo diré: Ved la chispa
y el luminoso átomo
que preferí a la arcilla.
EMILY DICKINSON Complete Poems, 1924 (publicación póstuma)
TIZIANO Venus Anadiómena, 1525
Lo increíblemente fuerte como para ver el muro que la cerca, y desafiarlo con su estar-ahí.
Desdeñosa de las migrañas, del infortunio y de la dilación de una apostura decisiva (la de su esencia).
Crucigramas y profecías.
A ella le gusta desenmarañar nudos, bordar esperas, inobjetarse.
De tres en tres.
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