25.9.09

FRAGMENTOS DE LUZ: "Hacer una hendidura hacia lo desconocido"

... el cuadro se desarrolla lentamente, día a día, en el silencio y en la paz. Es el cuadro el que me enseña a apartarme de la rueda frenética del tiempo. Lo que quiero lograr es su secreto, su inmovilidad.

1986

Yo no sé lo que las obras quieren decir. Simplemente son. Quizás no haría falta decir nada, sólo mirar. Yo me paso horas mirándolas, en el taller. Las miro, entro en su misterio. El misterio ha guiado mi mano adentrándome en su noche. En cierto modo, debe ser una experiencia parecida a la de los místicos, la profunda noche que atraviesan para poder acceder a la luz.

1934

He dibujado muchísimo, he dibujado para acercarme a las personas, a sus emociones interiores. El dibujo fue una escuela de paciencia. Cuando acababa un dibujo, tenía conciencia de haber adelantado como persona, de ser más hombre, de encontrarme más cerca de la condición humana. Este sentido de fraternidad me lo ha proporcionado el dibujo en mayor medida que la pintura. La pintura es más como una búsqueda, un peregrinaje.

1972-3

Me resulta imposible explicar con palabras la alquimia del trabajo que quiere transformar el paisaje en aquello que esconde, transformarlo en su reverso, en su fondo secreto. Siempre he intentado pintar su centro. Vértigo; intentar alcanzar la profundidad del mundo.
No hay que perderse en la habilidad o la costumbre. Todo lo contrario: fuente y nacimiento. Pintar es dirigirse cada día hacia la fuente a buscar el agua. La luz.
¿Por qué crear fealdad cuando la belleza nos rodea? Siempre me he sentido como responsable de tanta belleza como hay. Con el deber de pasar por sobre mis estados de ánimo, de mis propios momentos de dolor, de mis dudas y volcarme sobre esta tarea inmensa, este bautizo que es la pintura: la inmersión en la belleza de Dios.

Balthasar Klossowski de Rola [BALTHUS]
Textos de: "Mémoires de Balthus: recueillies par Alain Vircondelet". Monaco, du Rocher, 2001


1995

Cantar del alma que se huelga de conocer a Dios por fe

Que bien sé yo la fonte que mana y corre,

aunque es de noche.


1. Aquella eterna fonte está escondida,

que bien sé yo do tiene su manida,

aunque es de noche.


2. Su origen no lo sé, pues no le tiene,

mas sé que todo origen della viene,

aunque es de noche.


3. Sé que no puede ser cosa tan bella,

y que cielos y tierra beben della,

aunque es de noche.


4. Bien sé que suelo en ella no se halla,

y que ninguno puede vadealla,

aunque es de noche.


5. Su claridad nunca es oscurecida,

y sé que toda luz de ella es venida,

aunque es de noche.


6. Sé ser tan caudalosos sus corrientes,

que infiernos, cielos riegan y las gentes,

aunque es de noche.

7. El corriente que nace de esta fuente

bien sé que es tan capaz y omnipotente,

aunque es de noche.


8. El corriente que de estas dos procede

sé que ninguna de ellas le precede,

aunque es de noche.


9. Aquesta eterna fonte está escondida

en este vivo pan por darnos vida,

aunque es de noche.


10. Aquí se está llamando a las criaturas,

y de esta agua se hartan, aunque a escuras,

porque es de noche.


11. Aquesta viva fuente que deseo,

en este pan de vida yo la veo,

aunque es de noche.

San Juan de la Cruz

2 comentarios:

german dijo...

Dijo mi madre que cuando
me lleve la vida a la ruta del pan
y ella falte a cuidarme
y no esté su consejo
ni esa luz que la sangre sabe dar,
habrá un ser que a mi espalda
con mi forma y con alas
y que ángel se llama, y es mi bien.

Dijo también que aquel ángel
invisible a todos y también a mí,
el que en aires de sombra
por un viento en el alma
me daría en su savia la verdad.
Así fue que seguro
eché rumbo a la vida
con la fuerza del ángel en mi andar.


Después, con el tiempo me fui
por soles que van a la ansiedad,
pero el ángel no estaba
lo perdí por la infancia,
de la escuela a la casa, tiempo ayer...
Soledad del intento
de gritar con los sueños
la verdad que en el hombre no se dio.

Cuando la luna en su viaje
me rompe las noches en un ángel de alcohol,
me desangro en las mesas
y la luz de un amigo
es el ángel que guarda mi dolor,
y la calle me junta
con un ángel distinto,
con un hombre cualquiera, como yo.

Duele saber que la cosa
que quise de niño era piel de ilusión,
y que el ángel camina
con los pies del cansancio
que nos trepa a la vida por luchar,
y se muere el relato
de la madre que un día
nos dio un ángel de guía con su amor...

De Hugo Diaz, para vos. Cariños y suerte en este novo caminito..

GISOFANIA dijo...

gracias, querido. Muchas gracias por la siempre presencia...